Monitoreo ambiental

El monitoreo se inició de forma previa a la puesta en funcionamiento de la planta y continúa hasta el día de hoy. Este control es efectuado tanto por la empresa, como por el Laboratorio Tecnológico del Uruguay (LATU).

 

Distintas reparticiones del Estado también comprometen su esfuerzo para controlar el buen funcionamiento de la planta. El Ministerio de Ambiente realiza su propio monitoreo ambiental y está previsto que, en caso necesario, se apoye en laboratorios del exterior.

En marzo de 2007 comenzó a funcionar la Comisión de Seguimiento Ambiental de la planta de celulosa de Fray Bentos. La misma constituye un ámbito de intercambio entre organismos del Estado, la empresa y actores locales.

Actas de la Comisión de Seguimiento

 

Las áreas de monitoreo son las siguientes:

 

Meteorológico

A fines de noviembre de 2005, se instaló en el predio de la planta una estación meteorológica automática que registra los siguientes parámetros: temperatura, humedad, dirección y velocidad del viento, presión atmosférica, radiación solar y precipitaciones.

Estación meteorológica en línea 

Aire

Con la cooperación y el asesoramiento del Instituto Meteorológico de Finlandia, en junio de 2006 comenzó a operar una estación automatizada de monitoreo de la calidad del aire en las cercanías de la planta que permite satisfacer todos los requerimientos de la Autorización Ambiental Previa. La misma es operada por el LATU y permite hacer el seguimiento de los siguientes parámetros: dióxido de azufre (SO2), óxidos de nitrógeno (NOx), monóxido de carbono (CO), compuestos reducidos de azufre (TRS), material particulado (MP10) y material particulado total.

Valores de TRS en línea

Ruido

El nivel de ruidos se monitorea mensualmente en varios puntos alrededor de la planta.

Aguas subterráneas

Desde abril de 2005, se monitorea la calidad de las aguas subterráneas en varios puntos cercanos a la planta.

Suelo

En el monitoreo del suelo se analizan metales (arsénico, cadmio, cromo, cobre, zinc, mercurio, níquel, plomo), pH, contenido de carbono orgánico y sulfatos.

Flora

Se monitorea la presencia/ausencia de epifitas del género Tillandsia, tal cual lo requiere la Autorización Ambiental Previa (AAP). Para ello, se realizan relevamientos de campo en dos áreas: una alrededor de la planta y otra en un área de referencia, alejada de la misma.

​Fauna

Para el monitoreo, se instalaron dos apiarios, uno en el área de influencia de la fábrica y otro en una zona alejada, que se toma como referencia. En cada punto se registra la producción apícola, las variaciones en el comportamiento de las abejas, los parámetros de calidad en miel (humedad, acidez, color, análisis polínico, material insoluble) y la presencia de contaminantes en miel (sulfatos, mercurio, dioxinas y furanos).El manejo y control de los dos apiarios está a cargo del LATU, que trabaja en conjunto con un apicultor experimentado de la zona, en base a protocolos pre-establecidos.

Social

El monitoreo social analiza los siguientes aspectos: demanda de servicios (salud, educación, vivienda, esparcimiento, comercio y alimentación, turismo, y transporte), análisis de las variables sociodemográficas (número de habitantes, edad, sexo, etc.) y análisis de las actividades antrópicas (sociales, políticas, económicas y culturales).

Arqueológico

La Autorización Ambiental Previa establecía que, durante la fase de construcción, todos los movimientos de tierra a realizarse en el predio debían ser supervisados por un arqueólogo, quien en caso de detectar material de valor patrimonial, coordinaría las acciones de rescate y el destino del material con la Comisión del Patrimonio Cultural de la Nación.

El monitoreo arqueológico empezó el 20 de abril de 2005, antes de los movimientos de tierra y continuó hasta el 30 de setiembre de 2005. Durante los trabajos de monitoreo se relevaron sistemáticamente todas las ventanas naturales y artificiales existentes en el predio. Éstas son elementos que aumentan la visibilidad de los materiales y, en consecuencia, las probabilidades de detección (pueden ser cuevas, cárcavas o perfiles de erosión, entre otros).

Río Uruguay​

Además de controlar la calidad de los efluentes, desde abril de 2005 la empresa está realizando un monitoreo ambiental del río Uruguay en diferentes puntos. El monitoreo ambiental realizado por la empresa comprende aguas arriba de la planta, a la misma altura y aguas abajo. Todos los meses se extraen muestras con las que se miden más de 50 parámetros y se comparan con la Línea de Base, la cual alude a los valores de las variables que describen la situación ambiental antes de que la planta estuviera en funcionamiento.

Asimismo, se realiza un seguimiento de indicadores de las condiciones de vida de los peces y del estado de su hábitat. Esta actividad se realiza dos veces por año e implica monitorear el plancton y los organismos que viven en el río. La misma está a cargo de un grupo de científicos de la Facultad de Ciencias, del LATU y de un experto finlandés externo a la empresa.

 
Principales parámetros del río Uruguay, diciembre 2022

 

Resultados de los monitoreos